El pasado 24 de marzo la casa encuestadora Massive Caller presentó su medición mensual de Gobernadores, ejercicio en el que evaluó aprobación, desaprobación, la percepción de inseguridad en los estados y el índice de confianza del que goza cada mandatario.  En Veracruz el morenista Cuitláhuac García Jiménez no salió bien librado.

De acuerdo con estos resultados levantados a través de mil encuestas telefónicas aleatorias, García Jiménez es de los mandatarios con mayor desaprobación, al ubicarse en la posición 26 de 32, con solo 39.1 por ciento de aprobación.

En la misma posición se ubica en lo que hace a la percepción de la inseguridad, pues 48.9 de los encuestados respondió que Veracruz es un estado inseguro. Junto con Colima, Jalisco, Sonora, Michoacán, San Luis Potosí y Zacatecas, estamos en la lista roja o negra de las entidades más peligrosas.

El Gobernador morenista solo gana un lugar, el 25, en el índice de confianza, con solo 26.5 por ciento contra el 46.7 por ciento que tiene el panista Mauricio Vila Dossal, de Yucatán, el mejor evaluado de todo el país; aunque eso sí, no tan peor como el mandatario del vecino estado de Puebla, su correligionario Miguel Barbosa Huerta, que está en el último lugar con solo 16.5 por ciento de confianza. Y aunque el Presidente en cada visita le levanta la mano y ensalza al veracruzano por su honestidad, no ha sido suficiente para que así lo vea el grueso de la población.

Habrá que seguir de cerca otras evaluaciones que sacarán en próximos días diferentes encuestadoras para ver cómo evoluciona Cuitláhuac García, ya cada vez más cerca del término de su mandato, aunque lo cierto es que desde que  éste inició se ha ubicado en los últimos lugares; cuando mejor le va en la media tabla, pero conforme inicie la cuenta regresiva de su administración los números pueden moverse, para bien o para mal, lo que será una condicionante para saber si va o no al Senado por la plurinominal. Aún hay tiempo de enmendar algunas cosas.

@YamiriRodríguez