Foto: Mafalda Oficial

Por: Alejandra Pinzón

Según el artículo 19 de la Declaración Universal de los Derechos Humanos todo individuo tiene derecho a la libertad de opinión y de expresión lo cual el ser humano no tiene que ser reprendido por sus opiniones difundidas. De este derecho se desprende la libertad de prensa.

Cada día se evidencia como este derecho es censurado por la oposición y posturas radicales en los medios de comunicación en la actualidad. El portal Reporteros sin fronteras afirma que México es el país más peligroso para ejercer el periodismo debido al asesinato de 80 periodistas y más de 170 desapariciones en la última década como consecuencia de las intimidaciones de los carteles de la droga hacia los periodistas.

Sin embargo, los factores que nos llevan a no desarrollar la libertad de expresión es el hecho de no respetar la opinión contraria y diversa que genera el libre debate y desata las controversias. Además de imponer un estilo de vida y tendencia cultural étnica o religiosa que cause censura en la libertad del ser humano.

El atentado contra el semanario Charlie Hebdo este año el cual hacia las caricaturas de Mahoma y otras figuras religiosas, quizás hizo reflexionar al mundo sobre qué limites debe tener la libertad de prensa e hizo replantear su significado hacia el mundo. ¿Por qué poner en tela de juicio la libertad de prensa si es un derecho fundamental? Porque en un mundo que no tolera el pensamiento diferente y callan nuestras palabras con balas, el periodista busca la una manera diversa y alternativa de informar al igual que nuestra libertad de expresar es un derecho como vivir sin poner en peligro la integridad física del ser humano sin ser censurado.