La Bolsa Mexicana de Valores y la paridad del peso mantuvieron un arranque negativo de año al cerrar su segunda jornada consecutiva con pérdidas ante un entorno global en el que incide la caída en los mercados del petróleo, la continua fortaleza del dólar y la aversión al riesgo en Europa por las próximas elecciones en Grecia.
De acuerdo con información de la Bolsa Mexicana de Valores (BMV), el Índice de Precios y Cotizaciones (IPC) finalizó la sesión de ayer con un descenso de mil 16.10 puntos, es decir, perdió 2.41 por ciento respecto al cierre previo, colocándose en 41 mil 99.37 unidades.
Con este desliz, el IPC marcó su nivel más bajo desde el cierre del 17 de diciembre. En las dos primeras jornadas de 2015, la bolsa acumula una pérdida de 4.8 por ciento, el mayor resbalón bursátil en un arranque de año desde 2000, cuando tras dos días de operaciones hubo una caída en el IPC de 6.42 por ciento.
La firma Consultores Internacionales señala que el principal impacto es para las finanzas públicas, por lo que no descartan para este año la posibilidad de recortes o al menos ajustes presupuestales. “Así, el fantasma de caer o al menos estar al filo de un precipicio fiscal se empieza a vislumbrar”.
Información de Milenio
Información de Milenio
Publicar un comentario