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Dejaré a un lado el gran palmarés de Xavi Hernández Creus con el Barça y con la selección española y me centraré de lleno en su capacidad futbolística y en lo privilegiados que somos de tener oportunidad de verlo convertir este hermoso deporte en clases de maestría futbolística absoluta. Sin duda para mí, es uno de los más grandes centrocampistas de la historia por su habilidad mental y técnica envidiable que lo convierten en el mejor jugador catalán de la historia.

El de Terraza tiene una mente superlativa y brillante para mover el balón, levantar la vista y abrir espacios, dar pases entre líneas milimétricas que abren las defensas más estrechas, y también una pasividad e inteligencia para escoger la mejor decisión en el momento exacto para dar un pase que solo él puede dar.

En el manejo de los tiempos, Xavi sabe a la perfección cuándo es momento de jugar con pase directos y cortos y cuándo es momento de utilizar las bandas para darle velocidad y amplitud al juego del Barça. El maestro maneja el esférico con una facilidad exquisita, en cualquier circunstancia y contra cualquier rival, y realiza incansables vueltas alrededor del adversario como un total experto.

Xavi es como cualquier maestro que pide la asignatura para enseñar qué hacer con la pelota, y es un tipo que no tiene gran fortaleza física ni una estatura promedio, pero sí una estatura futbolística que lo convierte en el Midas del fútbol ya que transforma cada balón que toca en oro.

Con el Camp Nou a sus pies y una inmensa manta blanca con 6RACIESXAVI, el jugador catalán se despidió de su afición en un emotivo partido en donde no pudieron faltar sus lágrimas. Fue sustituido al minuto 86 para que los culés pudieran cantar su nombre una vez más, ya que ahora se marcha al Al-Sadd de Qatar después de 17 temporadas, en donde estoy seguro que seguirá impartiendo clases de fútbol.

6RACIESXAVI, 6GRACIESCAPITÁ, ENS VEIEM AVIAT.