Ángel Viveros

* Iguala, corredor de la cocaína bajo control CIA, DEA y …

TEORIA DE LA CONSPIRACION: Los mexicanos comienzan a acceder a la historia secreta que había sido invisible, o negada por autoridades. Una historia diferente a la “Verdad Histórica” oficial y que sigue poniendo de cabeza al gobierno mexicano: Caso Ayotzinapa. Aun cuando todo figura en las miles de fojas de la averiguación de la Procuraduría General de la República y nada diferente al reporte de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos con sus 200 especialistas que intervinieron, se siguió una política de ocultación y distorsión de los acontecimientos, sin razón. Así pasó de un asunto 100% local de Iguala, a uno federal arrullado por la PGR que ha causado daños internacionales al país, pues lo que no era conspiración ahora podría serlo con la intervención de la ONU, la OEA, y algunos parlamentos que atizan contra México.

Hasta el momento la PGR ni la CIDH ha dicho cuál fue el móvil del enfrentamiento entre policías municipales con estudiantes de la normal de Ayotzinapa. Tampoco a quién beneficiaba, como premisas fundamentales. La punta de la hebra podría comenzar a tomar forma en la declaración reciente del presidente norteamericano Barack Obama sobre la ruta de la cocaína hacía su país era Iguala, Guerrero. Aquí podría iniciarse la desactivación de quienes sostienen posiciones incómodas tanto de simpatizantes del movimiento a favor de los normalistas desaparecidos, de grupos del exterior, organismos internacionales, como de los padres de los 43 estudiantes, así como de la inhumación de la verdad histórica. Como dijo Zibgniew Brezinsky en su obra la era de la “Tecnotrónica” que diseña una sociedad cada vez más controlada y manipulada de cuerdo a los grupos de poder. Así esa misma Comisión de Derechos Humanos también manipuló la información. Refiere el quinto autobús, que figura en el expediente, pero soslaya que estaba cargado de cocaína, que policías entregaron al ejército a los estudiantes y estos a su vez los dieron al grupo criminal Guerreros Unidos. De la misma manera acepta la versión del experto peruano de la CIDH, José Luis Torero quien afirmara que fue imposible que los normalistas hubiesen sido quemados en Cocula, y que considera deficiente y desatendida por Emilio Torres García, egresado de la universidad de Cuba, experto por 20 años en procesos térmicos quien asegura que pudo ser posible la incineración en ese basurero pues cuando un cuerpo humanos que se le pone basura, plástico, llantas y cartón en 6 horas se consume 50%. Los criminales estuvieron en el lugar 16 horas Tampoco la CIA y la DEA estaban ajenos a este problema. Quien no dice que los jesuitas también están en el ajo de confabulación, pues fue el padre Alejandro Solalinde Guerra quien dijo habían sido muertos los jóvenes –luego fue echado de la normal por los padres de los normalistas-, y el Papa Francisco lo repitió, aunque la jerarquía mexicana le llamó la atención, en la práctica Solalinde solo obedece al Vaticano.

Cuál fue en el fondo el trabajo de la CIDH en este asunto. Cuando la PGR les entregó el expediente se dieron cuenta que estaba en total desorden. Lo que se iniciaba en la hoja 5 seguía en la 50 o la 100. Los 200 ayudantes comenzaron a darle orden y digitalizar el abultado volumen que seguramente ni el ex titular de la PGR, Jesús Murillo Karam leyó. Así es como se fraguo la otra historia ya que según la ideología de los investigadores internacionales el contenido sería explicado de un modo u otro. Solo que históricamente la CIDH nunca había entregado resultados de sus indagaciones antes de dejar el país donde las hicieron como fue en esta ocasión de la conspiración. Por esta razón para los peritos de la PGR las declaraciones de los expertos estaban en el expediente. Para los del CIDH era noticia por haberse ocultado datos esenciales. Sin embargo, respecto a la actuación del ejército nadie ha dicho una palabra.

Al final la mentira y la política suelen caminar juntas sin estorbarse, tal como lo manejó el gobierno mexicano el caso Ayotzinapa que ahora cae por su propio peso. El eje del infundio fue la llamada “Verdad Histórica”, que fue basada en un punto de verdad se escondió el embuste. De esta manera esta falsedad política tuvo y sigue teniendo efectos devastadores porque se mintió a todos los mexicanos y al mundo externo. Decimos que fue una conspiración por el ejemplo reciente de la política del miedo instituida en el sexenio pasado por la inseguridad que tuvo un matiz crítico, pues se convirtió en la apoteosis del conformismo y de la sumisión. Solo que el caso Ayotzinapa se volvió una torre de Babel, toda confusión y ahora pocos saben cuál es el axioma. Esta es la razón por la cual algunos afirman que tal vez nunca se conozca la realidad. De todas maneras como es el texto del Apocalipsis que se consideró una falacia, aunque en el fondo se trata de una guerra psicológica de dominación del mercado de las religiones, donde existe un chivo expiatorio: el anticristo.