Miembros de la Unión Nacional de Trabajadores Agrícolas (UNTA), se encuentran en la mira por diversos delitos como desvío de recursos, invasión de predios ilegalmente, además de obligar a otros miembros a acudir a marchas sin su consentimiento.

Tal es el caso del actual dirigente estatal de Chihuahua Mario Lerma Sáenz, quien ha sido denunciado por haber desviado recursos de la organización campesina para beneficiarse personalmente, a través de negocios que ha establecido con prestanombres.

Otro caso es el de Hidalgo, donde integrantes de la UNTA fueron acusados por invadir un terreno de nueve hectáreas en la colonia Los Olmos, donde incluso, colocaron el logotipo de la organización como señal de que esas propiedades les pertenecen.

Ante esto, integrantes de la misma UNTA han solicitado que se investigue a los dirigentes locales por los presuntos desvíos e irregularidades que ocurren al interior de la organización.