El futuro del proyecto cuatrotero de transformación nacional está en riesgo.
La sociedad expectante comienza a manifestar su repudio a un proyecto político que se ha encargado de dividir a los mexicanos, de hundir su economía y de no garantizar de ninguna manera su seguridad.
Pero en el tránsito hacia lo que será el arranque formal del proceso electoral del 2021 en donde se disputarán el control del Congreso Federal y Local, 15 gubernaturas entre una infinidad de ayuntamientos, los partidos políticos velan armas.
En recientes días, diversos medios han manejado la teoría sobre la posible construcción de una coalición que le responda de frente a la supuesta conformación del Bloque Opositor Amplio (BOA) que el mismo presidente López Obrador validó en una conferencia mañanera.
Ese trabuco electoral estaría conformado por los aliados de Morena.
Así el Partido del Trabajo (PT) y el Partido Verde Ecologista de México (PVEM) estarían sumándose a esta posible coalición, para toserle de frente a los conservadores, como les ha llamado el mismo AMLO.
¿Pero le conviene a un partido como el Verde Ecologista volverse aliar con Morena, cuando todas las encuestas evidencian una caída abrupta en la popularidad y en la confianza de quienes hoy ocupan algún cargo por ese instituto político?
Todo indicaría que no, la verdadera razón radicaría más en la serie de negocios y amarres que sus dirigentes pudieran mantener de la mano del actual gobierno.
¿Pero pesarán más los posibles beneficios económicos en corto tiempo, o pesarán más los costos políticos que habrá de traer la coalición?
Seguramente eso ya lo midieron los dirigentes nacionales de ese instituto político, que cada vez más ven con reticencia la manera en como el Ejecutivo y sus gobernadores asumen la agenda medio ambiental.
El costo de construir un Tren por la selva del sureste del país, así como el de impulsar proyectos de refinación de combustible a la vieja escuela, mortifican a los que se identifican con este instituto político.
La 4T ha sido sumamente indiferente a cuidar y respetar los principios y valores de ese partido político.
En entrevista con este reportero https://www.facebook.com/Ventanaver1/videos/196755411670550/ el líder estatal del PVEM en Veracruz, Marcelo Ruiz Sánchez desliza la posibilidad de no acompañar a Morena en los próximos procesos electorales.
Por el contrario, deja entrever la factibilidad de reforzar a sus liderazgos para llegado el momento garantizar la permanencia del partido –hoy en juego- ante la posible llegada de más partidos políticos.
Si como se afirma el PVEM estaría armando un entramado plan para conformar un trabuco con la llegada a sus filas a militantes de otros institutos políticos que pudieran reforzar su capital político, aguas.
Y es que la presencia y fuerza de personajes como Javier Herrera Borunda –ex diputado federal- asesorados por un par de ex gobernadores bien pudiera ser suficiente para darle un trato diferenciado y especial a esta fuerza política.
Quién crea que el Verde Ecologista estaría entregado a los caprichos de Morena se equivocan.
¿Y si el PVEM no va con Morena, como se pondrían las cosas?
Seguramente la derrota de la transformación de cuarta estaría garantizada.
Al tiempo.
astrolabiopoliticomx@gmail.com
Twitter: @LuisBaqueiro_mx
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