Último Momento

lunes, 14 de septiembre de 2015

Si no nos quieren, paren la guerra

Teresa Gurza

En los últimos meses no hubo día, sin alguna noticia sobre los inmigrantes y sus intentos por cruzar el Mediterráneo para entrar a Europa.

Empujados por la pobreza, la violencia y los regímenes fundamentalistas, las familias dejan todo para huir a lo desconocido; lo que implica romper redes sociales y lo que se ha tenido en el país propio de donde si las cosas no estuvieran tan mal, no saldrían; porque siempre es mejor, vivir en lo de uno.

“Nosotros no queremos ir a Europa; si ustedes no nos quieren, por favor ayuden y paren la guerra” gritaba, según reporte de varios medios, un niño sirio afuera de una estación de trenes de Budapest.

Ese niño es una de las 380 mil personas que en lo que va del año, han atravesado el Mediterráneo; los dos mil 850 que murieron, subieron a 31 mil la cifra de fallecidos desde el 2000.

Y la ONU calcula, que en los próximos meses lo intentarán cuando menos 850 mil, más.

Unos llegan medio asfixiados en bodegas de barcos, contenedores y camiones atestados, otros no sobreviven; como la esposa y los dos hijitos de Kurdi, que pagó dos mil 500 euros para alejar a su gente de la guerra en Siria que ya tiene cuatro años; pero la lanchita naufragó antes de llegar a la isla griega de Kos y ellos y siete niños y 15 adultos de otra familia, se ahogaron.

Y fue precisamente la fotografía de su hijo Aylan, boca abajo en una playa mojada con sus shorts azules y su camisita roja, la que finalmente generó algunas respuestas políticas a un problema que nos concierne a todos.

Pero en el que tienen mayor responsabilidad países como Estados Unidos y algunos europeos, que sostienen a los dictadores y les venden armas en beneficio de sus intereses; y que además, gastan miles de millones de dólares en impedir la entrada a los que huyen.

Pero ahora con todo y sus problemas económicos, esas naciones tendrán que enfrentar las consecuencias de sus actos; que son el origen de la actual y desbordada ola de refugiados.

La Canciller alemana Angela Merkel, propone fijar una cuota obligatoria a los países de la UE; lo que será discutido este 14 de septiembre por un Consejo de Ministros, que se reunirá en Bruselas; donde seguramente Inglaterra, Hungría y Polonia, encabezarán a los opositores a dar refugio a la mayor afluencia de migrantes desde la Segunda Guerra Mundial.

Y el Secretario General de la ONU, Ban Ki Moon, manifestó estar horrorizado y con el corazón roto “porque no es un problema de números como muchos jefes de gobierno piensan, sino de solidaridad”; y prometió que el 30 de septiembre, durante la Asamblea General del organismo, hará una reunión sobre el tema.

Igual que los coyotes mexicanos, los traficantes que apretujan en “pateras” a muchos más de los que caben, hacen con ellos negocio.

“Desbordados por la demanda, hacinan a sus clientes en las decenas de zodiacs que flotan estos días en las costas griegas como restos del viaje… en ellas se lee: ‘ocupación máxima 13 personas` y los pescadores locales aseguran que cargar más de 35 personas es receta segura para un naufragio; pero ellos meten hasta 65," cuenta el periodista Manuel Vicent en la revista semanal del pasado 12 de julio del diario El País.

Y fija a Esmirna, en la costa turca, como uno de los epicentros del negocio.

“Como si de una agencia de viajes se tratara -relata- en la plaza de Basma los mediadores van a la caza de migrantes compitiendo en precios”... y agrega que tan solo en este año, la policía griega ha detenido 727 traficantes.

Y como la demanda es alta y la inversión pequeña: salvavidas que no sirven, bidones de gasolina que se agotan a media travesía, balsas que se desinflan y motores que fallan, “los pateros y sus patrones y organizaciones, han ganado en los últimos 15 años más de 16 mil millones de dólares anuales”.

Debemos entre todos parar esa situación y exigir refugio para los que ya llegaron.

Y por cierto que les iría bien a muchos desteñidos europeos, mejorar su raza teniendo descendencia con esos guapísimos hombres y mujeres sirios de pieles canela y ojos preciosos, que según la ONU conforman el 51 por ciento de quienes buscado refugio han llegado este año a Europa.

Publicar un comentario

 
Copyright © 2014 GUSTAVORENTERIA